Beatriz Garvía Peñuelas
Participación
Vida afectiva y vida sexual y reproductiva de las personas con síndrome de Down. El derecho a formar una familia
Reflexión personal
La sexualidad y la afectividad forman parte de desarrollo humano. Negarlo implicaría no reconocer a las personas con SD como seres humanos, capaces de hacerse adultos y gozar de sus vidas. En la Fundación somos testigos de que algunos de ellos lo consiguen, con los apoyos necesarios. Nuestro reto es cambiar la mirada, entender que no son niños eternos y facilitar su posicionamiento como personas adultas con todas sus consecuencias