IV Congreso Iberoamericano sobre el síndrome de Down

Salamanca (España) 16, 17 y 18 de Marzo de 2016

Mi experiencia en los pisos de vida independiente: escritos y recorrido

Presentado por
José Borrel Doz

Autores

  • José Borrel Doz  (Down Huesca)

Resumen
Escribí mi primer libro cuando vivía en el piso de la avenida Ramón y Cajal, con Daniel. En el año 2012. Allí tenía mucho tiempo y escribía siempre, me gustaba escribir. Me dieron un premio por haber escrito el libro. Esto para mí fue un regalo de navidad. Me llevó escribirlo algo más de dos meses. Empecé a escribir este maravilloso relato de mi experiencia en el piso porque me pareció una buena idea explicar mi aventura a los adolescentes de la Asociación y a sus padres, para que puedan vivir esta experiencia como algo personal y consideren los pisos de vida independiente como su propia casa. Cuando escribí mi primer libro, llevaba tres años en un piso de vida independiente, emancipado de mis padres. Y aún sigo viviendo en el piso de forma independiente y autónoma. Ahora he acabado de escribir mi segundo libro sobre mi vida. Tiene más páginas que el primero, este segundo libro tiene 25 capítulos. En el primer libro escribí cosas de mi experiencia en los pisos y también en el segundo. Empezó mi vida en el piso con mis compadres Mónica, Daniel y Miquel, en el año 2009. Ese año a mí me costó empezar a ser independiente. El primer año en los pisos hay que aprender muchas cosas y por eso es un poco complicado. Al año siguiente, en el piso entró Guillermo, porque Mónica volvió a Zaragoza. En el segundo año me lancé a la piscina. Al curso siguiente, la convivencia en el piso comenzó a mediados de septiembre de 2011. Este año estaba con Daniel y con Florencio. Luego nos quedamos solos yo y Daniel, porque nuestros amigos se marcharon de viaje por el mundo. Estrenamos nuevo piso en septiembre de 2012, con Daniel. Esta situación de vivir ya solos con Daniel la viví con tranquilidad, amabilidad y buena relación. En septiembre de 2013 vuelvo a cambiar de piso. Está en la Avenida Ramón y Cajal. Y allí sigo viviendo ahora. Mi amistad con los amigos de los pisos es una maravilla, nos llevamos muy bien. Lo que hemos aprendido en los pisos es que hay que respetar los ritmos y los gustos de cada persona, sean lentos o rápidos. Que cuando surge alguna dificultad de convivencia hay que hablar y debatir. Por mi parte estoy llevando el piso con mucho interés. Y ya llevo 7 años en los pisos y he escrito el libro